¿Por qué los emprendedores cubanos invierten en el ecosistema digital? ¿Ha sido rentable hacerlo? ¿Cuáles han sido los resultados? Son preguntas que intentarán responder por qué la transformación digital es un proceso escalado y de todos.
Cuando abrieron masivamente las licencias por cuenta propia, los emprendedores se enfrentaban a una disyuntiva: cómo promociono mis servicios, por qué canales, con cuáles impactos. La primera gran respuesta estuvo -aún continúa estando- en el paquete semanal o llamémosle ecosistema offline.
Sin renunciar al Paquete Semanal- debido a la incipiente, pero ascendente conexión de los cubanos en aquella época y cuyo incremento ha sido paulatino- los emprendedores pusieron su atención hacia el ecosistema digital para fomentar su marca y darse a conocer.
Ante la demanda, apareció la oferta y como resultado emprendimientos como “agencias publicitarias” que ofrecen diversos servicios y variedad de precios que auxiliaban a los emprendedores. Pero invertir en el ecosistema digital no es rentable si no tienes una estrategia diseñada.
Mínimo, deben contratar a un especialista en Marketing, Community Manager, Webmaster, SEO, profesiones y profesionales cuya labor principal es posicionar la marca o el negocio, al menos, entre los primeros de Google Cuba.
Antes de eso, deben conseguir un hosting y un dominio, pagar un informático, lo cual supone gastos, como son los costos de mantener un hosting anual, tarjetas de internet, entre otros, por lo que es una inversión a largo plazo en pos de recoger sus frutos y no cansarse.
Entonces, ¿es viable mi negocio en el ecosistema digital? ¿Qué modelos de negocios voy a emplear? ¿Qué especialistas / recursos necesito? Son preguntas que tal vez se han hecho unos u otros, pero lo que parece cierto es que los emprendedores han apostado por ese escenario de participación y convergencia.
Trasformar negocios pareciera sinónimo de estar en el ecosistema digital. Si bien es cierto, eso serían acciones de Marketing Digital no de transformación digital, un proceso que reorienta toda la organización hacia un modelo eficaz de relación digital en cada uno de los puntos de contacto de la experiencia del cliente. Un proceso para lograr una ventaja competitiva en cuanto al producto, servicio o la entrega que permite pensar en nuevos modelos de negocio y ser rentables y sostenibles.
Pero eso no es tarea de hoy para mañana. Es como jugar al ajedrez, en el que conoces que cada pieza tiene su función y que luego se interconectan entre sí en función de una estrategia, una estrategia digital que pasa por tres componentes fundamentales: gestión de la experiencia del cliente (experiencia de usuario, entender al cliente, nuevos canales digitales), de la tecnología (inteligencia artificial, big data, etc.) y la empresa (cultura digital, digitalización de procesos). La transformación digital no es solo para empresas tecnológicas, es para todos.
1 Incipy